Nuevo Centro de Desarrollo Artístico
Por Sergio Mejía Cano
El pasado jueves 24 de este mes de agosto, se llevó a cabo la inauguración del Centro de Desarrollo Artístico, situado en la calle Oaxaca número 220 sur, colonia centro de Tepic, Nayarit, centro cultural que lleva por nombre el del joven talento musical nayarita, José Julián Mercado López.
En dicha inauguración estuvo presente la licenciada Viridiana R. Peña, directora estatal del programa Bienestar de Jóvenes Construyendo el Futuro, la restauradora de arte, Nathalya González, así como el doctor Roberto Fierros Aroza, secretario general de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al servicio del Estado (FSTSE), entre otras personalidades ligadas al Arte y la Cultura en el estado de Nayarit.
Este centro de desarrollo artístico será coordinado por el señor Enrique Valencia Ibarra que, en lo sucesivo, señaló, se lanzarán convocatorias para las clases que se impartirán en este centro las que consistirán en música, pintura en todos sus tipos, así como grabados, danza, expresión física, teatro, etcétera.
Las clases de música incluyen el aprendizaje a la vez de los instrumentos musicales que prefieran los futuros alumnos como piano, batería, saxofón, trompeta, guitarra, etcétera. Las clases de pintura están a cargo de diversos artistas plásticos de diversos géneros con la mejor disposición de trasmitir su arte a las nuevas generaciones.
Destaca que en la cuestión de pintura y grabado será instruida y estará a cargo del extraordinario grabador, especialista en “miniprit”, Juan Carlos Ponce, quien por cierto presentará una exposición de su arte de grabado en la hermana República de Cuba, específicamente en la ciudad de Cienfuegos, del 18 al 20 de octubre del presente año, augurándole un gran éxito como los que ha tenido en otras exposiciones fuera del país, así como a nivel nacional y local.
El que este Centro de Desarrollo Artístico lleve el nombre de José Julián Mercado López, se debe precisamente como un temprano homenaje y reconocimiento a este joven talentoso de la música de apenas 23 daños de edad, quien ha demostrado su gran calidad artística con el piano y el saxofón, además de haber destacado ya como compositor de varios danzones, baladas, valses, entre otros ritmos, así como de música contemporánea.
Por lo que ya está en el Conservatorio Nacional de Música que depende del Instituto Nacional de las Bellas Artes en la hoy Ciudad de México, en donde está cursando su maestría en composición, así como de director de orquesta, graduándose en tres años más.
De ahí que el poner su nombre a este centro de desarrollo artístico es un bien merecido homenaje, pues a pesar de su temprana edad, se ha destacado como un músico de gran talento.
Pero además, es muy merecedor de este homenaje debido a su don de gentes, por su sencillez y humildad personal, sin que su ya considerable fama se le haya subido a la cabeza, pues en su trato es sencillo y amable, atento a cuanta pregunta se le hace, así como cuando explica cómo fue que en forma autodidacta se inició en la música gracias a que desde niño observaba a su abuelo, originario del municipio de Santiago Ixcuintla, tocando una vieja guitarra, lo que le llamó la atención desde niño despertando su gusto musical y, desde luego, el talento que nació con él.
José Julián Mercado se siente orgulloso de ser tepiqueño, en donde nació un 20 de julio del año 2000, en el barrio de la colonia Valle de Matatipac, siendo su mamá la señora Luz María López Ávalos, quien es terapista del lenguaje, y su papá el señor José Mercado Madera, ingeniero agrónomo, tiene una hermana de nombre Andrea, quien le lleva ocho años en la edad.
José Julián se considera como una persona normal, que fue, como la mayoría de los niños en la escuela primaria inquieto, con vagancias de las que continuamente sus profesores le llamaban la atención para que se corrigiera, así que afirma no haber sido un alumno sobresaliente como otros compañeros a los que se les decía que eran “cerebritos” para los estudios y comportamiento tranquilo, por lo que él fue más bien un desastre tanto en la primaria como en la secundaria.
Estar en el Conservatorio Nacional de Música es un sueño desde los diez años de edad, pues estudia música desde los nueve años, así que en cuanto oyó hablar del Conservatorio, se le formó un sueño que ahora, afortunadamente se le ha cumplido; un sueño hecho realidad de lo que se siente muy orgulloso, por lo que piensa en no defraudar a ninguna de las personas que lo han impulsado desde pequeño. Sea pues. Vale.