Migrantes varados en nuestro país
Por Sergio Mejía Cano
La empresa ferroviaria Ferrocarril Mexicano (Ferromex) interrumpió el tránsito de por lo menos 60 de sus corridas de trenes de carga con el pretexto de proteger la integridad física de los migrantes que aprovechan estos trenes para trasladarse a la frontera norte de nuestro país. Noticia que se dio a conocer recientemente en varios medios impresos, televisivos y portales de internet.
En un boletín girado por esta empresa concesionaria de ferrocarril se decía que ya es una enorme cantidad de gente encima de sus trenes por lo que fue necesario detener su marcha; aunque estuviera perdiendo 40 millones de pesos diarios.
Polizones a los que en el argot ferroviario se les denomina como trampas los ha habido desde que hay trenes en la República Mexicana, por lo que es muy común mirar al paso de los trenes cómo viajan muchas personas sobre el techo de las unidades de arrastre o en el interior de los que corren vacíos o dentro de las góndolas y plataformas.
Desde luego que esta detención de las corridas de trenes de carga en el noreste del país, entre los estados de Coahuila y parte de Tamaulipas, podría tener algo más de fondo y que el motivo no sea en sí el exceso de migrantes viajando a bordo de los trenes. Algo pudo haber pasado tal vez con los embarcadores que, a fin de cuentas, se dice han sido los más afectados por la detención de la carga que esperaban en tiempo y forma como habitualmente reciben el flete contratado,
Obviamente que con esta detención de trenes no faltaron los detractores del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), tachándolo como el artífice de este paro, siendo que en sí, AMLO no tiene el poder de influencia ante una empresa concesionada al capital privado y menos con los dueños de esta concesión como con Germán Larrea Mota Velasco, de quien se dice es el socio mayoritario del Grupo México a quien se le otorgó la concesión de Ferromex, pues por conflictos mineros y, por haberle quitado un tramo de vía de poco más de 100 kilómetros en el Istmo de Tehuantepec, la relación entre el empresario Larrea con AMLO no es muy buena que digamos.
Así que por lo mismo, lo más seguro es que el señor Germán Larrea no se hubiese prestado a seguir o acatar una sugerencia de AMLO para detener el paso de los migrantes tal y como han afirmado algunos opinadores que le echan la culpa de este paro de trenes, Incluso, en los noticieros de Notisistema.com de Guadalajara, Jalisco, en entrevista con la reportea Griselda Torres Zambrano, el señor Enrique González, director del albergue “FM-4 Paso libre por Guadalajara), quien señala que este paro de trenes es una “estrategia de contención” para detener a los migrantes que ya no caben en los albergues tanto en el centro como en el norte del país y otras entidades.
Queda claro que la cantidad de migrantes que atraviesan nuestro país para llegar a la frontera norte se ha incrementado considerablemente; sin embargo, ¿de qué sirve interrumpir su marcha hacia el norte si de todos modos y como se dan a entender no cejan en su empeño siguiendo la metra trazada de llegar al norte a como dé lugar, sin importar los riesgos que pudieran correr.
El problema es que, si se quedan varados en cualquier parte del país, la desesperación de esta gente migrante aunada con el hambre podría orillarlos a cometer ilícitos en contra de los habitantes de los lugares en donde estén varados. Se entiende que varias de las ciudades fronterizas, si no es que todas ellas ya tienen graves problemas por la gran cantidad de migrantes de diversas nacionalidades que pretenden ingresar a los Estados Unidos; de ahí que mucha gente piense o crea que sí se les esté interrumpiendo el tránsito hacia el norte del país; para que no colapsen esas ciudades fronterizas más de lo que han colapsado con la presencia de tantos migrantes.
Si fuera una estrategia del gobierno Federal el interrumpir el paso de los migrantes, sería una muy mala estrategia, pues nuestro país no tiene la capacidad ni la infraestructura para absorber a toda esa gente, pues no se les podría dar empleo a todos y cada uno de ellos; además, se podría desatar aún más la violencia, pues habría que recordar que el hambre es canija y más quien la aguante.
El pretexto de Ferromex de estar interesado por la integridad física de los migrantes es totalmente baladí e incongruente, ya que, si no le interesa a esta empresa ferroviaria la integridad física ni bienestar de sus trabajadores, mucho menos les va a interesar la salud de los migrantes.
Sea pues. Vale.