CON PRECAUCIÓN 

Es muy necesario separar la basura orgánica de la inorgánica 

Por Sergio Mejía Cano 

Con pocos días de anticipación se dio a conocer a través de las redes sociales y diversos medios de información que entraría en vigor el programa para la separación de la basura para no revolver los residuos orgánicos con los inorgánicos. Pocos días porque el único video e información fija que se encontró en las redes y medios informativos, están fechados el 30 de julio pasado.  

Dicho anuncio decía que a partir del 5 de agosto los tepiqueños tendrían que separar la basura para que en las zonas en donde pasa el camión recolector los días lunes, miércoles y viernes, los orgánicos se recogerían los lunes y viernes y los inorgánicos los miércoles. Y, en las zonas en donde pasa la basura martes, jueves y sábado, los orgánicos se recogerían los martes y sábados y los inorgánicos los jueves; pero en la zona centro en donde pasa el camión recolector todos los días de la semana, los orgánicos se levantarían los lunes, miércoles, viernes y domingo también. 

Sin embargo, ayer día 6 de agosto, en el periódico Express de Nayarit, apareció una nota firmada por el reportero, Ramón Vargas, en donde se informa que “será hasta nuevo aviso lo de la separación de la basura”. En el grueso de la nota se informa que por lo pronto se seguirán recogiendo todos los desechos en la forma y días acostumbrados, porque al parecer, las autoridades harán un programa a través del cual buscarán socializar el nuevo esquema, antes de proceder a las sanciones.  

Y vaya que se necesita un programa de socialización, pues eliminar una costumbre de años no se puede hacer de un día para otro, ya que se necesita hacer conciencia en la ciudadanía de la necesidad de tener que separar la basura debido a la contaminación que genera en los depósitos sanitarios en donde es vertida la basura. Pero también tendría que ser necesario buscar otro lugar para que haya los depósitos correspondientes en donde en uno se tire la basura orgánica y otro para la inorgánica, porque si no, obviamente que de nada serviría tener o estar separando la basura si a fin de cuentas va y se deposita en el mismo lugar. 

Y qué bien que se detuvo este proyecto, pues debido la escasa información al respecto mucha gente no supo de este nuevo programa de tener que separar la basura, pues el aviso no se difundió masivamente o si se hizo, la mayoría de la población no se enteró, ya que la mayor parte de los avisos se dieron a través de las redes sociales y en algunos medios informativos a los cuales mucha gente no tiene acceso o no los ve, como pasa hoy en día con la televisión abierta que, infortunadamente ya muy pocas personas sintonizan los canales de televisión prefiriendo mejor aplicaciones de películas o entretenerse con otras como el Facebook, el YouTube y otras. 

Así que avisar a la población respecto a que tiene que separar la basura en orgánica e inorgánica tiene que ser más metódico y hacer llegar al máximo posible de la población, además de crear conciencia de que es absolutamente necesario tener que hacerlo por el bien de nuestra propia salud evitando en lo posible que siga la contaminación de los mantos freáticos  

Ya en varias entidades del país se han implementado programas similares y, por lo que se sabe y se ha documentado, en la mayoría de los casos estos programas han fracasado o no han dado los resultados esperados, precisamente por la falta de socialización de gran parte de la población, así como de los mismos encargados de la recolección de la basura. 

En la ciudad de Guadalajara, Jalisco, la mayoría de la población sigue acostumbrada a tirar la basura suelta, es decir, a granel y cuando pasa el camión recolector, los encargados del camión la vierten sobre los demás desechos sueltos, porque mucha gente no embolsa la basura como sucede en Tepic, Nayarit; son pocos los ciudadanos que embolsan su basura. Así que, cuando se implementó alguna vez la separación de la basura, la orgánica se embolsó, sin embargo, esas bolsas con residuos orgánicos se aventaban junto con la misma basura suelta, así que, cuando se comprimía la caja del camión para hacer más espacio el jugo de la basura orgánica se revolvía con la demás basura suelta. Hoy en día muchos tapatíos siguen embolsando la basura orgánica, pero la siguen aventando al mismo camión. 

Ahora bien, se tendrá que definir de bien a bien cuál es la basura orgánica y cuál la inorgánica, porque al parecer existe y existirá cierta confusión en gran parte de la población sobre cuál es una y cuál la otra, por aquello de los derivados. 

Sea pues. Vale. 

Redacción

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