Entes medievales que pretenden la destrucción de libros
Por Sergio Mejía Cano
En la entrega anterior nos referimos a las críticas que han recibido los libros de texto gratuitos, por lo que algunas personas comentaron que en sí, de este tema hay mucha tela de donde cortar y que será algo que seguirá dando mucho de qué hablar durante un buen tiempo y más, cuando ya se conozca de bien a bien el contenido de dichos libros, ya que hasta hoy la mayoría de ellos se están dando a conocer en forma digital.
Sin embargo, ya también un lector de noticias de Televisión Azteca, Javier Alatorre, dio a conocer parte del contenido de estos libros, aunque por lo visto en una forma por demás tergiversada enfatizando el “virus del comunismo”. Nada más patético se pudo ver, para muchas personas todo lo hablado por el señor Alatorre, porque se podría decir fehacientemente que más se estaba refiriendo al pasado neoliberal que a la actualidad, con la diferencia precisamente de una sola palabra: comunismo por neoliberalismo.
Porque de todo lo que habló Javier Alatorre fácilmente podría encajar en el pasado desde Enrique Peña Nieto hasta Miguel de la Madrid Hurtado y un poco más allá. Habla este lector de noticias de enajenación y adoctrinamiento de los niños, de que el contenido de los libros en cuestión acrecentaría la pobreza porque se eliminan las matemáticas y se habla de acontecimientos del pasado que las nuevas generaciones no entenderían, etcétera.
Está visto y comprobado que la pobreza de la población mexicana aumentó considerablemente entre 1982 y 2018, porque fue una etapa de mucha inflación en donde los mexicanos llegaron a ser millonarios, y no precisamente nada más en penicilina, sino en pesos, pues la inflación llegó a tal grado que el pasaje en los camiones urbanos llegó a costar mil pesos; pero no por eso mejoró el nivel de vida de los mexicanos, sino que nada más se manejaban miles y millones de pesos, pero prácticamente sin el valor que hubiera significado en otros años más atrás de esta etapa.
Infortunadamente, mucha gente que miró y oyó lo dicho por Javier Alatorre en Televisión Azteca se quedó con esa impresión tomándola como una gran verdad y que no hay más allá más que lo dicho por este mentiroso manipulador que, en sí, en realidad podría no tener culpa alguna, pues solamente es un títere de su patrón y hace lo que se le ordena.
Lo triste del caso es que hay personas de escasos recursos y clase media baja que se van con esta finta, gente a la que se le pregunta por qué les cae mal el presidente López Obrador, y aducen que, porque así lo ven y oyen en la tele y, al preguntares en qué los ha afectado este presidente no saben decir en qué. Entonces cuando se les dice que vean otras informaciones se niegan quizás por no querer que se les rompa el esquema que se han formado y conformado. Personas que, si les dicen que López Obrador come niños crudos, posiblemente lo crean así.
Claramente se ve que ahora la oposición y adversarios de la actual administración van con todo en contra tergiversando muchos de los hechos e inventando a la vez informaciones y actos por demás falsos, como el del supuesto general que resultó no ser general ni pertenecer en forma alguna al ejército mexicano, así como videos de personajes de la política venidos a menos como Ricardo Anaya Cortés, en donde supuestamente muy indignado también ataca el contenido de los nuevos libros de texto gratuito en donde si no fuera por la seriedad del tema, causaría más risa y pena que certidumbre en lo que dice y afirma.
Sin embargo, y afortunadamente, existen analistas serios que dan el toque objetivo a lo que significa el contenido de estos cuestionados libros de texto, como el académico Manuel Gil Antón, a quien entrevistó el periodista y comunicador Julio Hernández López en su programa de YouTube “Astillero Informa”, en donde Gil Antón da una amplia explicación sobre este tema y, desde luego a los posibles errores en su contenido lo que no es nada nuevo, pues siempre los ha habido. Asimismo, también Julio Astillero entrevista al profesor-investigador del CIDE, Carlos Pérez Ricart, quien expone que lo hecho por Javier Alatorre en TV Azteca, ya es más bien político que crítica a los libros, por la posibilidad de que el dueño de Alatorre, perdón, el patrón y dueño de Televisión Azteca, Ricardo Salinas Pliego, por alguna oscura razón trata de presionar al presidente López Obrador con algún fin.
Ahora el medieval Marko Cortés Mendoza, dirigente nacional del PAN está convocando a la destrucción de los libros de texto gratuitos.
Sea pues. Vale.